ni siquiera el frío puede con las ganas de coger la bici; una buena inverná la que estamos teniendo los últimos días, y parece que puede durar algunos más;es lo que toca, pero estamos mal acostumbrados y parece que es más de lo que en realidad es, ya que aquí en las zonas bajas apenas han caído unos copos que ni siquiera han cuajado; intento recordar las veces que ha nevado (pero nevar de verdad, que cuaje y dure al menos un día) y creo que podría hacerlo con los dedos de una mano... y me sobraría alguno.
es lo que tiene el efecto atemperante del cantábrico, aunque por otro lado produce una humedad que hace que la sensación de frío sea escalofriante si no estás acostumbrado 8bueno, y si lo estás, también).
en fin, que fui a buscar nieve y la encontré, aunque demasiada para poder
rodar por ella, ya que las ruedas se hundían demasiado(rodar por nieve es muy cansado, pero el sonido de las ruedas abriéndose paso por una fina capa de nieve es una pasada). además, en la parte más alta de la ruta, dentro de la niebla que dejaba muy poca visibilidad, había una mini-tormenta ártica, con ventisca y nevando de lado....
